Tecnología- Carissa Véliz, profesora de Oxford y experta en privacidad y protección de datos, advierte sobre cómo la información personal que aceptamos entregar a una aplicación móvil como WhatsApp y Facebook puede ser vendida a cientos o miles de empresas, e incluso terminar en la web oscura.
«Debemos recordar que Facebook compró a WhatsApp en 2014 y en ese momento prometió que las dos empresas no iban a compartir datos. En 2016 cambian de opinión y deciden que sí se compartirá la información, pero el usuario tenía la opción de decir que no. En cambio, ahora anunciaron el cambio para que no exista oportunidad de rechazo y si no aceptas las condiciones ya no podrás usar la plataforma WhatsApp», dice.
Los peligros. Véliz dice que las medidas de WhatsApp son bastante intrusivas. Algunos de los metadatos que se recolectan pueden ser usados para identificar a las personas revelando información cómo:
- Tu número de teléfono
- Los de tus contactos
- Tus fotos de perfil
- Cuándo estuviste en línea por última vez
- Datos referidos a diagnóstico como batería y uso del móvil.
Para poder imaginarlo, ¿qué tanto pueden saber de un usuario? ¿Hasta dónde pueden hacer el perfil de una persona WhatsApp y Facebook a partir de los datos que toman?
Todo dependerá de qué tanto se usa la aplicación y qué tanta información entrega el usuario, pero se pueden inferir todo tipo de cuestiones. Por ejemplo, quiénes son tus amigos, quiénes son de tu familia o tu pareja, dice la experta:
A partir de los datos se pueden inferir aspectos como:
- Orientación sexual,
- Tendencias políticas
- Qué tan bien duermes
- Si eres una persona que se levanta a medianoche a mirar sus mensajes
- También tu salud y tus intereses.
- Incluso tus adicciones o si tienes alguna enfermedad en particular.
En segundo lugar, se trata de un recordatorio de qué tan autoritarias son estas compañías que te presentan unas condiciones de uso que todo el tiempo están cambiando. Y una vez que ya llevas años usando la aplicación te dicen «todo o nada»; entregas tus datos o ya no puedes usar la plataforma, perdiendo tus mensajes y el contacto que cultivaste con gente durante mucho tiempo.
Después de tantas promesas rotas y tantas mentiras y escándalos, los usuarios están hartos de que se los explote de esa manera, de que no se los trate con respeto y no exista una posibilidad de negociación. Por eso creo que la respuesta a los cambios de WhatsApp fue tan negativa.