Washington, 23 mar. (EFE News).- Las autoridades de Boulder (Colorado) identificaron este martes al autor del tiroteo que dejó diez muertos en un supermercado de esa ciudad como Ahmad Al Aliwi Alissa, de 21 años, y le acusaron de diez cargos de asesinato en primer grado.
En una rueda de prensa, las autoridades aseguraron que todavía no tienen claros los motivos que llevaron a Alissa a abrir fuego con un fusil de asalto en el interior de un supermercado de la cadena King Soopers en Boulder, una ciudad de poco más de 100.000 habitantes al norte de Denver y una de las más ricas de Estados Unidos.
“¿Por qué ha ocurrido esto? Todavía no tenemos la respuesta. La investigación está todavía en su primera etapa”, dijo el fiscal del distrito de Colorado, Michael Dougherty.
Alissa, detenido este lunes tras el tiroteo y herido en la pierna, se encuentra ingresado en un hospital y se espera que sea trasladado este martes a una cárcel del condado donde se encuentra Boulder, explicaron las autoridades.
El sospechoso residía en la ciudad de Arvada, situada a unas 21 millas de Boulder, y había vivido “la mayor parte de su vida en Estados Unidos”, dijo la jefa de Policía de Boulder, Maris Herold, quien no especificó su nacionalidad.
Las autoridades también identificaron a las víctimas del tiroteo, cuyas edades oscilaban entre los 20 y los 65 años y entre los que había hombres y mujeres, además de un agente de policía de 51 años que tenía siete hijos, Eric Talley.
El resto de los fallecidos fueron Denny Strong, de 20 años; Neven Stanisic, de 23; Rikki Olds, de 25; Tralona Bartkowiak, de 49; Suzanne Fountain, de 59; Teri Leiker, de 51; Kevin Mahoney, de 61; Lynn Murray, de 62; y Jody Waters, de 65.
“NECESITAMOS VER UN CAMBIO”
“No solo hemos perdido diez vidas, sino que esto supone un horror y un terror reales para todos nosotros, (porque hablamos de) el simple hecho de comprar en un supermercado”, afirmó en la rueda de prensa el gobernador de Colorado, el demócrata Jared Polis.
El gobernador recordó que apenas “se acababan de volver a subir las banderas bajadas a media asta después de los trágicos tiroteos en Atlanta” que hace una semana dejaron ocho muertos, incluidas seis mujeres de origen asiático.
El congresista demócrata Joe Neguse, que representa a la ciudad de Boulder, pidió no permitir que el terror que vivieron los clientes del supermercado este martes se convierta en “la nueva normalidad”.
“Deberíamos poder sentirnos seguros en nuestros supermercados. Deberíamos poder sentirnos seguros en nuestras escuelas, en nuestros cines y en nuestras comunidades. Necesitamos ver un cambio, porque hemos perdido demasiadas vidas”, afirmó Neguse, en aparente referencia a la aprobación de nuevas medidas para reforzar el control de armas.
El de Boulder es el mayor tiroteo masivo en Estados Unidos desde agosto de 2019, cuando un hombre armado mató a 23 personas también en un supermercado de la cadena Walmart en El Paso.
El ataque ocurrió sobre las 14:30 hora local (20:30 GMT), y las imágenes emitidas en directo por Youtube por un testigo a los pocos segundos del inicio del ataque mostraron a dos personas abatidas en el exterior del supermercado y una en la entrada, mientras sonaban varios disparos desde el interior del edificio.