Ambos presidentes se reúnen en la Casa Blanca, donde se espera que lleguen a acuerdos migratorio y en la lucha contra el narcotráfico y la necesidad de modernizar la infraestructura en la frontera para agilizar los intercambios comerciales.
Los presidentes de Estados Unidos, Joe Biden, y de México, Andrés Manuel López Obrador, sostienen este martes una reunión de trabajo en Washington en la que, según altos funcionarios estadounidenses, la agenda estará dominada por el problema siempre absorbente de la gestión de los flujos migratorios, la lucha contra el contrabando de fentanilo, la modernización de la frontera para permitir el comercio y la seguridad, así como más visados de trabajo temporal.
El encuerntro empezó hacia las 11:30 am, hora de Washington, con el encuentro de ambos líderes en la Oficina Oval, el despacho presidencial en la Casa Blanca.
Biden habló primero, refiriéndose a AMLO como “mi amigo, mi compañero” y aseguró que “a pesar de los titulares exagerados que a veces vemos, tú y yo tenemos una relación fuerte y productiva… y diría que una sociedad”, dijo dirigíendose a su colega mexicano.
El mandatario se refirió desde el principio al tema migratorio, del que dijjo que había que abordarlo “como un desafío hemisférico compartido”.
“Mi administración está liderando el camino para crear oportunidades laborales a través de vías legales”, continuó Biden, y dijo que su gobierno estableció “un récord” el año pasado al emitir 300,000 visas H-2 para trabajadores mexicanos.
Biden dijo que Estados Unidos “también está acelerando nuestros esfuerzos para detener el tráfico ilegal de fentanilo” y trabajando para frenar la lucha humana. “Necesitamos que todos los países de la región se unan a nosotros”, agregó, mencionando a los migrantes encontrados muertos en un tráiler en San Antonio el mes pasado.
Siguiendo con el tono protocolarmente cordial ante las cámaras, López Obrador reconoció que “estos son tiempos verdaderamente difíciles”, en referencia a la pandemia del coronavirus, la guerra de Ucrania y la inflación que “el mundo entero está sufriendo”.
“Esta no será la primera ni la última ocasión en que cerremos filas para ayudarnos”, continuó AMLO. “A pesar de nuestras diferencias y también a pesar de nuestros agravios que no son fáciles de olvidar… en muchas ocasiones hemos podido coincidir y trabajar juntos como verdaderos aliados”.